La
química ha llegado a casa para mejorar nuestra calidad de vida, ayudar a
nuestra economía e incluso colaborar con el medio ambiente. En cualquier ámbito
del día a día, los productos químicos y sobre todo los plásticos, son ya
indispensables en la mejora de la sostenible, ayudando en aspectos tan
diversos como el agua, la energía o el transporte. Los aislamientos, las
cubiertas, las fachadas exteriores y los tabiques están hechos con componentes
plásticos que nos ayudan a ahorrar energía conservando el calor y aislando de
los ruidos exteriores.
Los productos químicos llegaron
a nuestra vida hace más de un siglo y la revolucionaron. Desde entonces no hay
esfera de la actividad humana que no se haya beneficiado de su uso. Están en
todo, cuando trabajamos, cuando hacemos deporte, cuando viajamos e incluso
cuando nuestros hijos se preparan para su futuro. La química está en lo que
hace nuestra vida más confortable, segura y económica. Gracias a las tuberías
de plástico nos podemos dar una ducha de agua caliente, beber agua potable o
mantener una temperatura ambiente agradable.